La circuncisión de los bebés varones es un procedimiento quirúrgico opcional para quitar la capa de piel (llamada prepucio o prepucio) que cubre la cabeza (glande) del pene. Se realiza con mayor frecuencia durante los primeros días después del nacimiento.
Los padres que deciden circuncidar a sus hijos recién nacidos a menudo lo hacen por razones religiosas, sociales o culturales. Si está tratando de tomar una decisión sobre la circuncisión, hable con el médico de su bebé. Solicite información actualizada sobre los posibles beneficios y riesgos médicos de la circuncisión.
Beneficios potenciales de la circuncisión
Algunos estudios sugieren que los niños que han sido circuncidados pueden ser:
- Menos propensos a desarrollar cáncer de pene más tarde en la vida – aunque esta forma de cáncer es extremadamente rara.
- Menos propensos a contraer infecciones de VIH y VPH.
- Menos propensos a contraer una infección del tracto urinario durante la infancia.
- Las parejas femeninas de los hombres que han sido circuncidados tienen menos probabilidades de contraer cáncer de cuello uterino.
Riesgos potenciales de la circuncisión
La circuncisión es un procedimiento doloroso. Los problemas resultantes de la cirugía suelen ser menores. Aunque las complicaciones graves son muy poco frecuentes, sí se producen. Éstas pueden incluir:
- Demasiado sangrado o infección en el área.
- Demasiada piel removida.
- Efectos secundarios del método o del medicamento utilizado para aliviar el dolor.
- El riesgo de complicaciones es menor en los bebés pequeños que en los niños mayores. Para minimizar los riesgos, el procedimiento debe ser realizado por un profesional capacitado y con experiencia, utilizando una técnica estéril. Alguien debería hacer un seguimiento con usted en los días posteriores al procedimiento para asegurarse de que el sangrado no ha aumentado.
El cuidado de un pene no circuncidado
El prepucio cubre la cabeza (glande) del pene de un niño. Durante los primeros años de la vida de un niño, el prepucio comienza a separarse del glande, pero puede no ser completamente retráctil (lo que significa que puede ser retirado) hasta que el niño tenga de 3 a 5 años, o incluso hasta después de la pubertad. Este es un proceso natural que ocurre con el tiempo. No es necesario hacer nada para que ocurra.
Un pene no circuncidado es fácil de mantener limpio y no requiere ningún cuidado especial:
- Mantén el pene de tu bebé limpio lavando suavemente la zona durante el baño. No intente retirar el prepucio. Nunca lo fuerce.
- Cuando su hijo tenga la edad suficiente, enséñele a mantener su pene limpio como le está enseñando a mantener el resto de su cuerpo limpio.
- Cuando el prepucio se separa, las células de la piel se desprenden y se desarrollan otras nuevas para reemplazarlas.
- Estas células muertas se abrirán paso por el pene a través de la punta del prepucio y pueden parecer bultos blancos y cursi. Estos se llaman smegma. Si las ves bajo la piel, no necesitas forzarlas a salir. Sólo límpialos una vez que salgan.
- Cuando el prepucio sea completamente retráctil, enseñe a su hijo a lavarse debajo de él cada día.